El RCD Mallorca B empató en casa ante la Penya Deportiva de Ibiza (1-1). Los de Julián Robles sumaron un punto después de un partido de mucha intensidad y que tuvo pocas ocasiones, pero un golazo para los locales. Quintanilla adelantó a los bermellones con un zapatazo desde la frontal del área. Ya en la segunda parte llegó el empate visitante desde los once metros.
Los locales llegaban al encuentro después de lograr un valioso punto en la Ciudad Deportiva de Paterna ante el Valencia Mestalla. A la Ciudad Deportiva Antonio Asensio llegaba un conjunto pitiuso situado en tercera posición y con la oportunidad de asaltar el liderato y eso se vio desde el inicio. Un equipo rocoso y duro que quería aprovechar sus ocasiones. Delante, un RCD Mallorca B en buena dinámica y bien plantado sobre el verde.
El filial bermellón se adelantó gracias a un golazo de Rubén Quintanilla después de un par de rechaces dentro del área. El mediocentro mallorquinista no se lo pensó dos veces para enganchar el balón y enviarlo a la escuadra ibicenca. En la recta final de la primera mitad el encuentro cogió mucho ritmo, pero ni locales ni ibicencos encontraron la meta rival.
Los segundos 45 minutos empezaron igual que acabaron los primeros. Una Penya que sabía a lo que jugaba con buenos balones hacia Chema que pivotaba y aguantaba para la segunda línea. Aún así, los bermellones aguantaron muy bien hasta que, en el 73, el colegiado señaló pena máxima para los visitantes después de una mano de Quintanilla. Salinas fue el encargado de lanzar y ejecutar el penalti que supuso el empate final. Un punto para un RCD Mallorca B en buena dinámica que visitará a la SD Formentera la próxima jornada.