Maravilló e hizo soñar con Europa a la afición del RCD Mallorca en las dos temporadas que estuvo en la isla. Su marcha al Villarreal dolió a muchos, tras la expulsión del RCD Mallorca de Europa. Una década después, Borja Valero se enfrenta a su pasado y da su versión sobre un conflicto que le afectó de lleno. "Yo estaba tranquilo porque yo volví al Mallorca cedido por el equipo inglés. Entonces había un acuerdo para una posible compra de parte del Mallorca, pero teniendo los problemas económicos que tenía, ni siquiera se pudo pensar en esa opción de compra para quedarme en Mallorca. Entonces, yo tuve que volver a mi equipo inglés. En el impás de irme del Mallorca entró el Villarreal y justo cuando yo firmé con el Villarreal, después de un poco la UEFA decide que el Mallorca no va a Europa League y justo es el Villarreal que entra en el puesto del Mallorca. Soy como la diana de las críticas de los aficionados del Mallorca y lo entendí así. O sea, era una cosa que me molestaba porque yo sabía que no tenía ninguna culpa, pero el malestar entre los dos clubes, la UEFA, hizo que mucha gente lo pagara conmigo".
Borja Valero jugó dos temporadas en el RCD Mallorca. En su primera etapa, el curso 2007-08 y de su debut en Primera División, el futbolista madrileño marcó 4 goles, repartió asistencias y luchó con el equipo para dejarlo a las puertas de Europa. Salió traspasado al West Bromwich Albion pero regresó cedido a la isla un año después. Volvió a firmar un año espectacular en Son Moix, marcando otros cuatro goles y dejando al equipo quinto en liga, a pocos segundos de clasificarlo para la Champions League. Pero la expulsión del Mallorca de Europa y la entrada en Europa League del Villarreal lo convirtieron en el objetivo de las críticas tras su traspaso al submarino amarillo. "Me daba pena más que otra cosa, porque yo siempre he tenido Mallorca en el corazón. Mi hijo nació allí. Vuelvo todos los años de vacaciones. Cuando el Mallorca volvió a Primera División, yo estaba en el campo viendo el partido. Es un equipo y una ciudad a la que tengo muchísimo cariño y me da un poco de pena tener que recibir ese tipo de insultos, de parte de algunos aficionados. Pero bueno, yo entendía la frustración y la rabia en ese momento, pero bueno, yo no fui el que decidí que el Mallorca se fuera. Yo luché hasta el último segundo para que entrara en Champions League, que de hecho a lo mejor hubiera sido la única forma de que el Mallorca pudiera haber jugado en Europa y que me hubiera podido comprar y haberme quedado. No pudo ser por pocos segundos, porque el Sevilla marcó en el último minuto y nos dejó fuera".
Borja Valero vive ahora una vida tranquila en Florencia junto a su familia. Tras más de 15 años como profesional, en equipos como RCD Mallorca, West Bromwich Albion, Villarreal, Fiorentina e Inter, después de haber jugado en tres de las cuatro grandes ligas de Europa, Valero decidió enrolarse en el modesto Centro Storico Lebowski, de un pequeño pueblo a las afueras de Florencia, y volver a jugar por un único objetivo: pasarlo bien. "He jugado más de 15 años como profesional al fútbol y ahora he vuelto a divertirme de verdad en lo que más me ha gustado hacer desde pequeñito, que es jugar al fútbol e ir detrás de la pelota. Creo que el Lebowski es una realidad muy bonita que intenta ayudar a la comunidad, a su pueblo, a Florencia, en todo lo que puede. Y esto me impactó mucho. Quería ser parte de ellos e intentar dar la mayor visibilidad posible para que tuvieran más recursos para hacer todavía más cosas. Y aquí estamos".
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